Esperado, esperadísimo penúltimo episodio de la segunda temporada. Y ha cubierto todas las expectativas.
Una característica que distingue este capítulo de todos los demás, es que transcurre exclusivamente en Desembarco del Rey. No había cabida para ninguna otra localización. Este hecho ha provisto al episodio de una continuidad y desarrollo apropiados y necesarios para narrar la primera batalla que nos muestran íntegra en lo que llevamos de serie.
Habrá quien no le ha parecido lo suficientemente espectacular o escaso de recursos pero hemos de considerar que se trata de una serie de televisión, no de una superproducción de Hollywood con presupuesto ilimitado. Con esas limitaciones en mi opinión han realizado un brillante trabajo.
Tengamos también en cuenta que George R.R. Martín, autor de la saga literaria, ha sido el guionista del capítulo, y eso se ha notado.
Más tras el salto.